“Quiero fuera a Salcedo y que deje
investigar a la justicia”
Por Santiago Ciraolo
María del Carmen Marone era la Jefa
de Gabinete de la Comuna 1 hasta que fue despedida de su cargo por Roberto
Salcedo, el titular comunal. El despido se dio en el medio de una serie de
denuncias de acoso sexual por parte de varias empleadas de Salcedo, entre las
que se encuentra la de Marone, quien lo acusó también de ejercer abuso de
autoridad, maltrato laboral y malversación de fondos. La denuncia se hizo
pública en la reunión de junta comunal y repercutió en que la Legislatura se
expida en un pedido de informes a la comuna por ambas causas. Llegó incluso a
ser portada de un matutino, pero no pasó a mayores: Marone sigue desempleada y
denuncia que tras su despido se esconde un entramado de corrupción. En diálogo
con “El Tambor de Montserrat”, Marone contó su versión de la historia respecto
al escándalo de Roberto Salcedo. “Me echaron claramente porque hice las
denuncias”, aseguró, y confesó sentirse atemorizada: “Vivimos con miedo, con
mucho miedo y no tenemos a quien recurrir”.
¿Cómo era el acoso?
Durante la campaña habíamos tenido un
episodio en el que sentí que me habían tocado. Pensé que ese primer roce había
sido casual, entonces lo dejé pasar. Ya el segundo no era casualidad. Le dije
que a mí no me gustaba que me tocaran, y me dice “Bueno, no pasa nada, no mira
nadie”. “Si mira o no mira nadie a mí no me importa”, le dije, “A mí no me
gusta que me toquen y vos me estás tocando sin mi consentimiento, entonces no
lo hagas más”. Esas cosas se siguieron sucediendo. Lo hablé con algunos
legisladores reelectos y gente de la campaña, que estaban en la misma lista de
él, me dijeron que no haga lio por el momento, que me fijara si lo podía
solucionar con él.
¿Ellos no iban a actuar por
vos?
Ellos no iban a actuar por mí,
absolutamente. Salcedo es misógino y maltratador, y los varones que lleva a
trabajar con él, son del mismo tenor que él. Actúan de la misma forma que él,
por eso también los denuncié. Te faltan el respeto continuamente, te hablan con
palabras soeces, todo ese tipo de cosas. De hecho a una de las secretarias que
Salcedo había tomado para él, después la quiso echar y la trataba en forma
despectiva -él, Mouriño y todos esos- de “Negra boliviana”, de “Monito”. A esa
chica la tenía que pasar a buscar por la casa, íbamos juntas a la comuna y
salíamos juntas porque ninguna se quería quedar sola con él.
¿Quienes integran la denuncia
entonces?
Ellos son: Roberto Salcedo, el
principal. Marcelo Díaz, que es trabajador de la Legislatura y a la vez
“trabaja” (sic) –va un rato a la comuna como encargado de la UAP. También hay
algo raro ahí porque está cobrando dos sueldos del Gobierno de la Ciudad y es
incompatible eso: cobra el sueldo de la legislatura y el de la comuna, que son
bastante onerosos ambos. Gustavo Minardi y Gabriel Mouriño son los otros dos,
que desde que los denuncié penalmente a todos ellos, ahora ellos me están
intimidando, amedrentando, enviándome cartas documento por calumnias e
injurias. Pero empiezan en agosto, cuando están denunciados desde el 3 de
junio. Me mandó también una carta documento una tal Rosa Montero, que trabaja
donde se pagan las multas y va al local de Salcedo. Así que para distraer y
dilatar los tiempos será.
¿El partido que dijo?
Al principio no dijeron nada. Nadie
se quería meter, querían que yo arreglara el tema con Salcedo. Pero claramente él
me despide luego de que yo hago las denuncias. Yo hago la primer denuncia en el
Ministerio Público Fiscal el día viernes tres de junio, el seis de junio voy a
INADI, y a las 17:30 de ese mismo día me cae el mail automático de baja de
contrato.
¿En concepto de que figura el
despido?
De nada porque no pusieron causa en
el despido, porque no la tienen. Lo que sí, la gente de secretaría
descentralizada me dice que él fue y les dijo, a todo esto vos imaginate que la
comuna tiene cámaras por todas partes –yo mido 1,50 mts y peso 47 kg, para que
te des una idea-. A la Secretaría de Descentralización dijo que yo fui
enloquecida y rompí toda la comuna, y eso no es cierto, pueden chequearlo en
las cámaras, la comuna está intacta. Dice que yo le pegué a tres de sus
empleados varones y que a una de las mujeres la quise tirar por la escalera.
Que me muestren la filmación y que me digan como yo con mi físico pude hacer
todo eso. Otra de las versiones es que le pegué a tres mujeres y a la cuarta la
quise tirar por la escalera. A lo que ni siquiera se pusieron de acuerdo en
hacer coincidir las versiones.
¿Respecto a la malversación?
Mirá, por ejemplo, yo nunca había
visto mi contrato porque cada vez que quería ingresar, las claves estaban
bloqueadas. Entonces, cuando me da de baja Salcedo pido un blanqueamiento de
clave y veo la cantidad de contratos y la desprolijidad: un contrato era por
2272 otro por 25000 otro por 27272, era una cosa rara y con fechas que se
superponían. Pero lo peor es que un par estaban firmados por Cristina Brunet
que era la presidente saliente de la junta Comunal, que había cerrado su
ejercicio el día 8 de diciembre y no había hecho ningún contrato en todo el
mes. Así que le robaron la firma electrónica a Brunet. A raíz de eso, hablé con
ella y le alcancé todo lo que yo tenía, porque antes de que los borraran, pude
imprimir los contratos y Brunet le hizo una causa por malversación de fondos
del estado y uso indebido de firma, con 58 fojas en el Juzgado de Instrucción
N° 4 y otra le hizo el Jefe de Gabinete de la Ciudad, Felipe Miguel, por el
acoso.
La causa va por dos planos
entonces…
Claro, por un lado, acoso sexual y
por el otro, la corrupción. La legislatura hizo un pedido de informes por el
acoso y lo de defraudación al estado. El Pro “aprueba” (sic) y da su firma a la
parte del abuso, pero hace sacar del original la parte de malversación, tema
del que no querían que se investigara. Pero la diputada Paula Penacca y Andrea
Conde a la semana, hicieron lo de la malversación y lo aprobaron todos,
inclusive los del PRO.
¿Cuánto tiempo llegaste a
trabajar para él?
Trabajé desde el 9 de diciembre de
2015 en la comuna, y con él durante la campaña para el pro, todo el 2015. Nunca
me imaginé que se iba a meter conmigo, porque soy una persona grande, que se
supone que era de su confianza porque por algo me eligió como jefe de gabinete.
Después atando cabos me di cuenta de por qué me puso en ese puesto que tampoco
corresponde -porque en la estructura de las comunas no hay jefe de gabinete-,
pero no importó. Él a toda costa quería un Jefe de Gabinete y era yo, que tenía
firma en el Banco Ciudad para sacar viáticos y caja chica. Sacábamos del banco
y él se quedaba con todo el dinero, Y también tenía firma electrónica para
autorizar el pago a los proveedores donde yo veía cantidad de irregularidades y
no los quería firmar.
¿Eran pagos para empresas que
no existían?
Las empresas existen, no eran de
Salcedo pero él hacía negocios y recibía dinero de ellas, sí. De hecho, hay
muchas que son por ejemplo, de una comunera, Mirta Marcos, empresas de los
hijos que tienen contratos con el Gobierno de la Ciudad, o arbolados. Por eso,
yo también mandé a los medios las conversaciones de Whatsapp de por ejemplo un
empleado -que yo no conozco, sinceramente- de la empresa de arbolado con una de
las chicas que cargaba el tema en las computadoras. Echaron a los dos, al chico
de la empresa privada y a esta otra que cargaba el arbolado, y el que cargaba
el tema de veredas también, donde dice la sobrefacturación que hacían, y con
cuánta plata se quedaban, que se la repartían entre los tres: entre la empresa,
Mirta Marcos y Salcedo.
¿Recibís amenazas?
Amenazas por parte de estos
personajes, de Salcedo, las cartas documento a modo de amedrentamiento. Me han
llamado por teléfono diciéndome que cuanta plata quería para cortar con todo
este tema. Les he dicho que lo único que quiero es que me paguen lo que me
deben, que es mi sueldo, que no me lo han pagado todavía. Me decían que pusiera
el número, les dije que no. Quiero que lo saquen a Salcedo, y hasta que la
justicia se expida, que esté sin goce de haberes. Después la justicia dirá lo
que tenga que ser. Pero que esté fuera y deje investigar a la justicia
tranquila. Lo que pasa es que es medio difícil, porque él es un hombre de
Martín Ocampo, que es el ministro de Seguridad y Justicia.
¿Vos cómo estás con esta
situación?
Pésimo. Hace cuatro meses que no
cobro, imaginate que no está el país como para estar cuatro meses sin cobrar,
sin sueldo. Me echaron claramente porque hice las denuncias, es claro porque
hago las denuncias y me echan, o sea que no hay otra posibilidad. Vivimos con
miedo, con mucho miedo y no tenemos a quien recurrir.
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