lunes, 24 de abril de 2023

Abril y el festejo de pascuas

 INFORMACIÓN GENERAL

Abril y el festejo de pascuas

Llega abril y para el festejo de pascuas, nunca falta la Rosca. El Tambor te enseña en pocos pasos, cómo hacerla en tu casa para disfrutar en familia, con amigos o con quien vos quieras.

por Marina Cerenique


Para dar comienzo a la receta vamos a preparar primero la crema pastelera, una vez hecha la llevamos a la heladera hasta que se enfríe. Para esto vamos a necesitar:

  • ·         250 cc de leche
  • ·         75 g de azúcar
  • ·         2 huevos
  • ·         esencia de vainilla
  • ·         25 g de harina
  • ·         15 g de almidón de maíz - maizena

Primero, colocamos la leche en una olla y la ponemos al fuego. Por otro lado, mezclamos los secos con los huevos hasta que se incorporen. A esto le agregamos un poco de la leche caliente y mezclamos bien (este paso es importante para que no se generen grumos en nuestra preparación). Esto lo vertemos a la leche una vez que comienza a hervir y batimos. No debemos dejar de batir hasta que la pastelera empiece a hervir (esto lo notamos cuando se comienzan a generar pequeñas burbujas en el centro). Luego del hervor, batimos por un minuto más, retiramos del fuego, agregamos un poco de esencia de vainilla y mezclamos. Luego, colocamos la preparación en un recipiente cubriendo la superficie con un film o una bolsita hasta que se enfríe.

Vamos a realizar un fomento previo. Para esto vamos a necesitar: 25 g de levadura fresca ,1 cucharadita de azúcar, 50 ml de leche tibia, 25 gr. de harina 0000. Mezclamos todo y dejamos fermentar hasta que duplique su tamaño. Para la masa vamos a necesitar:

  • ·         50 g de azúcar
  • ·         250 g de harina 0000
  • ·         2 huevos
  • ·         50 g de manteca pomada
  • ·         esencia de vainilla
  • ·         ralladura de limón o naranja
  • ·         pizca de sal

Para comenzar a formar la masa colocamos la harina en un boul, hacemos un hueco en el centro, agregamos la pizca de sal a los bordes. En el centro, vertemos el fermento ya levado junto con los huevos, el azúcar junto con la esencia de vainilla y, la ralladura que sea de nuestra preferencia. Formamos la masa e incorporamos de a poco la manteca pomada (es muy importante que tengamos paciencia en este paso, la masa al incorporar la manteca se va a volver más blanda -podemos agregar un poco de harina de más pero no mucha, ojo!). Amasamos enérgicamente hasta que la masa no se nos pegue en las manos. Dejamos levar hasta que duplique su tamaño. Una vez pasado ese tiempo desgasificar la masa y en una fuente para horno formamos la rosca. Dejamos descansar unos 30 min más y la mandamos a un horno precalentado a 180 grados de temperatura, aproximadamente por 20 min. Retiramos, le colocamos la crema pastelera y volvemos al horno unos 10 o 15 min más. (es importante en este caso que confíen en su intuición y en el conocimiento de los tiempos de cocción de su horno ya que los tiempos son a modo de referencia).

Una vez lista, ¡ya puede disfrutar con unos ricos mates!


¿Sabías qué...

 INFORMACIÓN GENERAL

¿Sabías qué... 




El 15 de abril se cumplieron setenta años del peor atentado terrorista en la historia del subte de Buenos Aires. En un episodio poco recordado de nuestra historia, durante el año 1953, un grupo terrorista opositor al gobierno de Juan Domingo Perón hizo detonar aparatos explosivos en la estación cabecera de la línea A, en Plaza de Mayo. Lo hicieron durante un acto multitudinario de la CGT frente a Casa Rosada. ¿El objetivo? Asesinar a personas vinculadas con el peronismo.

La explosión dejó seis muertos y un centenar de heridos (diecinueve de ellos, mutilados de por vida). Un grupo que estaba compuesto por jóvenes universitarios de familias patricias fue encontrado culpable y condenado por este y otros actos de terrorismo cometidos durante ese período.

Entre ellos se encontraba Roque Carranza, un joven militante del radicalismo que, una vez liberado e indultado por la brutal dictadura conocida como "Revolución Libertadora", quien se dedicó a cultivar una carrera política en la Unión Cívica Radical.

Supó ocupar cargos durante el gobierno del presidente Illia hasta el golpe de Onganía, momento en que se sumó a la facción interna del radicalismo liderada por Raúl Alfonsín. Su carrera lo llevaría a ocupar los ministerios de Obras y Servicios Públicos (1983-1985) y Defensa (1985-1986) hasta su fallecimiento por paro cardíaco en febrero de 1986. A modo de homenaje, nombraron en su honor una estación del Ferrocarril General Mitre y la estación "Ministro Carranza", del subte D.

El hecho de que nombren una estación del subte en homenaje a un terrorista que puso bombas en una formación del mismo generó una comprensible indignación y reclamo, pero fue impuesto por decreto sin ningún tipo de participación popular. En el año 2016 hubo una oportunidad, con motivo del trigésimo aniversario de la muerte del músico Miguel Abuelo, de cambiar el nombre de la estación para recordarlo. Pero nuevamente el cambio fue resistido por las autoridades del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, por lo que la estación terminó teniendo una solución de compromiso con ambos nombres: "Ministro Carranza - Miguel Abuelo".

En ocasión del heptagésimo aniversario de la masacre, desde el Tambor de Montserrat insistimos en reclamar que los lugares públicos y monumentos de nuestra ciudad se adecuen a los valores de una sociedad democrática y plural como la que tenemos.

Cambios en el estacionamiento

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Cambios en el estacionamiento


A principios del mes de abril, el Gobierno de la Ciudad informó cambios en el estacionamiento, dentro de los que se destacan cuatro puntos centrales.

En primer lugar, se podrá estacionar en las calles, de ambos lados, durante las 24 horas del día.

En avenidas, también se permitirá aparcar de los dos lados, pero de 21 a 7 horas.

Por su parte, tanto en pasajes, calles con paradas de Metrobús o del lado de la Ciclovía, estará prohibido las 24 horas del día. Finalmente, los motociclistas tiene que estacionar sí o sí a cuarenta y cinco o noventa grados, obligatoriamente.

Calles asfaltadas

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Calles asfaltadas


Las últimas semanas fue dificultoso moverse por la zona oeste de Montserrat debido a trabajo de reparación y mantenimiento de calles. 

Entre las calzadas remodeladas, encontramos Solís, Virrey Cevallos, Sáenz Peña, Venezuela,

México, formando parte de un plan de obras realizado por el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires.

Preocupación por el aumento de casos de dengue

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Preocupación por el aumento de casos de dengue

En las últimas semanas, los casos de dengue aumentaron exponencialmente. La mayor concentración en es en el sur de la ciudad. ¿Cómo se previene?

 


El Ministerio de Salud de la Nación informó el pasado sábado 15 de abril en un comunicado de prensa que, durante la semana epidemiológica 14 de 2023 (es decir, del 2 al 8 de este mes) se notificaron en todo el territorio nacional 41.257 casos de dengue, de los cuales 37.914 adquirieron la infección en la Argentina.

La semana previa, en la Ciudad de Buenos Aires se confirmaron por prueba 1166 casos, de los cuales el 42% se ubicaban en la comuna 9, comprendida por los barrios de Mataderos, Parque Avellaneda y Liniers. En nuestra comuna 1, también se registaron casos. Los reclamos al Gobierno de la Ciudad crecen, en medida que los casos avanzan y focalizan en la zona sur, mostrando una vez más los niveles de desigualdad en los que se viven.

El alza de casi un 95% en comparación con el año anterior, no solo generó alarmas sino también colapso de varios servicios de guardia de hospitales de los distintos distritos donde el virus circula comunitariamente. Esta situación llevó a que diversos establecimientos comenzaran a diagnosticar por síntomas; tal es el caso del Hospital Santojanni, según confirmaron fuentes del Gobierno de la Ciudad.

Dadas estas circunstancias, cabe la pregunta general: si estamos en capacidad de definir la enfermedad o, al menos, comentar de qué va la mano. Establecido está que es una enfermedad transmitida por un mosquito. Lo cierto es que muchas veces nos quedamos allí ni tampoco conocemos las distintas cosas que hay que hacer para poder prevenir.

Lo cierto es que el dengue es una enfermedad viral transmitida por la picadura del mosquito Aedes aegypti. En el momento en el que el insecto se alimenta con sangre de una persona enferma de dengue y luego pica a otras, les transmite la enfermedad. Un mito que debemos derribar es ese: el método de contagio. Sólo por la picadura; no se transmite nunca de una persona a otra, ni a través de objetos o leche materna.

Los síntomas por lo general son:

  • ·         Fiebre (de menos de 7 días de duración).
  • ·         Sarpullido (exantema) que causa picazón.
  • ·         Malestar general.
  • ·         Cefalea (dolor de cabeza).
  • ·         Dolor retroocular.
  • ·         Dolor muscular.
  • ·         Dolores articulares.
  • ·         Cansancio intenso.
  • ·         Náuseas y vómitos.

Luego de comenzar con los síntomas, llega la hora del tratamiento. Pero, ¿existe uno en particular? Aquí entramos en un callejón sin salida: no hay una vacuna o tratamiento específico para esta enfermedad. Es por eso que el tratamiento es fundamentalmente sintomático. Se recomienda a aquellas personas que lo contraigan, que se mantengan bien hidratadas para reponer líquidos y realizar controles y seguimientos médicos diariamente.

Los métodos de prevención son muy importantes ya que la fumigación no es suficiente para eliminar el mosquito. Lo fundamental es tratar de eliminar todos los posibles criaderos: recipientes que contengan agua tanto en el interior de los domicilios y sus cercanías. Hay muchos de ellos que pueden ser de utilidad para los mosquitos y quizás en nuestros hogares se encuentran en desuso: latas, botellas, neumáticos, trozos de plástico, bidones, cualquier elemento donde pueda juntarse agua. Hay que evitar estas situaciones y deshacerse de ellos. También, evitar que, en baldes, palanganas, botellas, pueda acumularse agua en su interior.

Otros tips: cambiar el agua de bebederos de animales, colectores de desagües de aire acondicionado o lluvia, dentro y fuera de la casa, cada 3 días. Se deben frotar las paredes de los recipientes con una esponja o cepillo a fin de desprender los huevos del mosquito que puedan estar adheridos.

Para no tener floreros y porta macetas con agua, se puede remplazar con arena húmeda. De haber patio o jardín, se deben mantener limpios, ordenados y desmalezados, con las canaletas y desagües de lluvia, limpios. También es importante para prevenir utilizar repelentes y espirales; y ropa clara que cubra brazos y piernas, especialmente en actividades al aire libre. ¡A no olvidarnos!



Fuentes: Min. De Salud de la Nación, Min. De Salud de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Infobae, Página 12, Nueva Ciudad

https://buenosaires.gob.ar/salud/plan-dengue-y-otras-enfermedades-transmitidas-por-mosquitos-aedes-aegypti/que-es-el-dengue

https://www.pagina12.com.ar/535023-dengue-crece-la-preocupacion-ante-el-brote-y-el-aumento-de-c

https://www.infobae.com/salud/2023/03/29/guardias-colapsadas-en-los-hospitales-de-la-ciudad-por-el-aumento-de-los-casos-de-dengue-lo-que-hay-que-saber-para-prevenirse/

https://buenosaires.gob.ar/salud/plan-dengue-y-otras-enfermedades-transmitidas-por-mosquitos-aedes-aegypti/que-es-el-dengue

Islas Malvinas: los jóvenes de hoy y la lejanía con la Guerra

 INTERÉS GENERAL

Islas Malvinas: los jóvenes de hoy y la lejanía con la Guerra.

Por Noelia Dans

Hablar de Malvinas es hablar de nuestra historia, soberanía e identidad. Malvinas nos une desde el rincón más al norte de nuestro país hasta el punto más austral en la Antártida. Hoy, a 41 años de la guerra, una mirada desde la juventud.


Siempre que pensamos en Guerra, lo primero que se nos viene a la cabeza es: qué lejana nos resulta. Solo imaginen que, para la población argentina menor de cuarenta años, la Guerra es algo que lee en libros, ve en películas y, lamentablemente, también cuando prende la televisión. Pero no deja de ser lejano; no es un monstruo que nos acecha, es más bien una ficción. Sin embargo, hoy, en el año 2023, el mundo aún sufre de las Guerras. Por las cuales nos vemos afectados, como la Guerra Ucrania – Rusia. Es un poco contradictorio lo que decimos, pero a lo que nos referimos cuando decimos que nos resulta lejana es que, si bien una guerra en cualquier parte del mundo puede generar una crisis en los países no afectados directamente, no podemos dimensionar el dolor causado por una Guerra.  Los argentinos y las argentinas que sí pueden dimensionarlo son quienes vivieron aquel abril de 1982 en nuestro país.

En el año 1833 las Islas Malvinas fueron usurpadas por las autoridades británicas, quienes expulsaron a los argentinos y tomaron posesión de las mismas.

El 2 de abril de 1982 Argentina decide, tras años de negociones -más de cien- desembarcar en las Islas Malvinas para recuperarlas de su invasión inglesa. En realidad, para ser más precisos, no es Argentina quien lo decide, sino el presidente de facto del momento: Leopoldo Fortunato Galtieri. El presidente de facto también fue quien decidió por las vidas de muchos jóvenes y adolescentes que se vieron obligados a combatir. El servicio militar obligatorio, más conocido como “colimba” para nosotros, fue una instrucción militar que se instaló en el año 1901 y duró hasta 1994; decidiendo en un sorteo entre todos los hombres mayores de 18 años quiénes se veían obligados a formar parte del ejército. Sí, como una lotería. Todos estos hombres y jóvenes se vieron obligados a combatir en las Islas Malvinas; muchos de ellos, estaban teniendo un primer contacto con las armas y así, sin más, tenían la orden de ir a combatir y asesinar soldados ingleses. Imagínense ustedes, tal vez desean ser arquitectos o médicos y un día su país les pide que suelten el lápiz y la regla, que dejen por allá el estetoscopio y que agarren un arma, que se van a la guerra. Imaginen el dolor de sus familias, de sus mamás, de sus papás que piensan que tal vez nunca regresen.

La Guerra de Malvinas dejó una gran cantidad de muertos, heridos, familias destruidas y un conflicto aún mayor. Los ingleses podrán devolvernos las Islas que nos pertenecen, algo que aún vemos muy lejano, pero lo que jamás podrán devolvernos es a los soldados caídos que fueron a recuperar lo que nos pertenece.

Escribir sobre la Guerra nos resulta difícil, nos resulta hasta incomodo, más cuando se trata de nuestro país; nos sentimos ingenuos, no porque nos creamos ingenuos, sino que en lo que trata a la Guerra, creo que no podemos llegar a expresar con palabras el miedo, la crisis y la desolación.

Hacemos un llamado a los jóvenes que hoy viven en un país, porque ni siquiera podemos decir un mundo, donde la Guerra es algo del pasado, donde gozan de decidir sus propios rumbos -aunque algunas veces los quieran hacer creer que no es así- un llamado para reflexionar esto y saber que debemos todos nuestros respetos a quienes combatieron en la Guerra de Malvinas. Nos parece muy importante que cada 2 de abril los, que cada vez que pensemos en Guerra, imaginemos que nuestros hermanos, nuestros padres o nosotros mismos podríamos haber estado en esta situación. Y pedimos, por la memoria de los combatientes y de nuestras Islas, que nunca dejaremos de decir que las Islas Malvinas, fueron, son y serán argentinas.

Mirar un poquito más allá

 EDITORIAL

Mirar un poquito más allá

Por Martín Ciraolo

 



Cuando tomé papel y lápiz para comenzar a escribir no supe por dónde comenzar –permítame la licencia, en tiempos de la era digital, dónde solo los nostálgicos escribimos en papel por placer y no por la necesidad o el apuro de tener que tomar nota de algún teléfono o lo que fuere.

Marzo fue demasiado vertiginoso y el comienzo de abril, con la llegada decidida del otoño y el cambio de clima, pensé que nos iba a permitir ver las cosas desde otro lugar. Atrás quedaron los 40 grados promedio de temperatura de un verano infernal, nunca tan literal. Ese frío, esa lluvia, esas hojas caídas que el viento se lleva podrían perfectamente haber significado un alivio para tiempos complejos como los que vivimos. Lo cierto es que no es tan así.

Mientras sigo escribiendo en la hoja, veo que en el margen superior escribí unos números. No tengo idea de qué son, porque la hoja estaba en la pila de “papeles borrador”. Me gusta hacer eso. Armar el esquema, escribirme dos o tres ideas para luego desarrollar. No importa eso, no me quiero ir por las ramas. Los números en el ángulo superior derecho de la hoja, casi ilegibles puesto que –quienes me conocen, saben- que tengo una letra pocas veces fácil de leer, de distinguir; ni que escribiera en código. No, tengo letra chica y difícil de descifrar.

Volviendo a los números, bien decía que no recuerdo de qué eran. Podrían haber sido parte de un número de teléfono o un documento; ni idea.

502 547, no lo sé. Me disparó a dos ideas u asociaciones de manera rápida. La secuencia 502 me recordó al viejo y querido colectivo rojo que tomaba de chico en Ezeiza cuando iba a la casa de mi abuela. Recuerdo que nos bajábamos del por entonces 86 (hoy, 8) cartel rojo –también- en frente al Hogar Evita y luego hacíamos esa combinación. Y la asociación del colectivo, con el paro de actividades que hubo luego del asesinato del colectivero Daniel Barrientos, ocurrido en el partido bonaerense de La Matanza. No quiero detenerme en el hecho en sí, ni en apreciaciones que no son lo que me interesa indagar –aunque bien podría decir que La Matanza tiene índices de inseguridad similares a otros distritos, pero carga consigo muchos estigmas, que llevan por ejemplo, una periodista de renombre, a decir que “personas de La Matanza fueron a ocupar un terreno en Mar del Plata”, hace no muchos días.

La segunda asociación a la que llegué muy rápidamente fue al alto índice de inflación. 7.7% en un marzo súper caliente que tuvo a los productos escolares a la cabeza. No sé por qué, quizás leí un número de 6 cifras para no ser considerado pobre o dentro de la clase media. Tampoco quiero ahondar en las causas de este fenómeno que come sueldos, billeteras, ahorros y nos complica la vida a diario. 

Pero mientras pensaba en estos dos ejes, me pregunté por qué llegue a esas asociaciones tan rápido. Hice un intervalo –diría Graciela, mi psicóloga-, puse una distancia, paré la pelota, levanté la cabeza. Pensé, pienso. ¿Hay algún otro número que haya sido tan importante como estos dos datos? ¿Por qué voy allí y no voy a otros? Si la semana pasada el gobierno nacional hizo entrega de la casa número 100.000 construida durante esta gestión. Es un dato muy importante. Son cien mil familias que han tenido una solución habitacional.

Pero no, me fui para otro lado. Y eso estimadxs, es lisa y llanamente por la influencia de los medios masivos de comunicación, de lo cual, nadie está exento. Marcan tendencia, generan opinión, inducen. Potenciado por redes sociales que fomentan la exacerbación, la inmediatez, la confrontación sin la necesidad de argumentar, con Twitter a la cabeza. La posverdad; la necesidad de reafirmar las creencias más que de recibir información y poder analizar fríamente para poder tomar decisiones. No voy a entrar en un debate sobre la subjetividad, saldado hace muchos años ya. Aquí en El Tambor tenemos nuestras miradas; heterogéneas, pero miradas al fin. Es por eso que siempre tratamos de tocar temas que no sean lo que ves en todos lados. Y no por una cuestión de “no repetir”, de no repetirnos. Por una cuestión de que, por más que sea con poca potencia, desde nuestro rinconcito en Montserrat, seguimos creyendo que otra manera de informar y compartir es posible.

Eso; compartir. De eso se trata. 

Somos la corriente - Pezones Cardozo

 MÚSICA

Somos la corriente

Pezones Cardozo

 

Las líneas de esta historia

Nos dictan del pasado

Florecen de sepia

Claustros de una tarde

Otra vez la tinta seca,

Exorcizando las ganas

Que huelen y huyen.

Somos grandes huecos

De todo lo que fue y será

Somos la corriente.

No hay cárceles en las pieles

Todo lo que arrastra el río

Puede hallar un puerto

Ser un viento nuevo

Que hable desde el dolor

Me hace rehén de misideas

Frente a la tormenta

Nunca hay que ser tibios.

Una estocada de quién sos,

Como bandera

Frente a la rompiente

Una visión que ha vuelto a arder

Nadie nos espera

Somos la corriente

Una visión que ha vuelto a arder

Nadie nos espera

Somos la corriente

 

Somos la corriente, es una canción registrada en el último álbum de Pezones Cardozo, grabado en vivo en el Marquee Session Live, ya disponible en todas las plataformas. La banda de rock liderada por Eduardo Gervasio, se presentará el próximo 6 de mayo en Galpón B, en nuestro vecino barrio de San Cristóbal – Cochabamba 2536 junto a Santo Cabrón y las entradas anticipadas se pueden conseguir a través del sistema Pass Line https://www.passline.com/eventos/pezones-cardozo-y-santo-cabron-en-el-galpon-b