EDITORIAL 

En otro formato

 

Marzo es un mes muy movilizante. Siempre lo fue, no es un tema nuevo.

La primera semana, envuelta en una marea verde, el grito de lucha por los derechos de las mujeres y las diversidades, se hacen eco por las calles de Montserrat -y de todo el mundo. La conquista de la legalización del aborto, pareciera que trajo una pizca de igualdad en un planeta super desigual. Afortunadamente, algunas cuestiones están sobre la mesa y comenzaron a discutirse. Sin embargo, cuando vemos que hay más femicidios que días en el año, es muy claro que estamos lejísimos de lo que deberíamos ser. No obstante, no hubo movilización. Concentración sí, pero con otro formato. Banderas, carteles, tapabocas, distancia (dentro de lo que se pudo).

La segunda semana nos trajo sobre la mesa el conflicto por el Mercado de San Cristóbal que, aunque su nombre no lleve el de nuestro barrio, está en uno de los extremos más recorridos y visitados de Montserrat. Los comerciantes salieron a la calle en reclamo de sus derechos, cortaron la avenida Entre Ríos e Independencia. No obstante, no hubo movilización. Concentración sí, pero con otro formato. Banderas, carteles, tapabocas, distancia.

La tercera semana, el epicentro de las actividades por el Día Nacional de la Memoria por la Verdad y la Justicia. Por iniciativa de las organizaciones de derechos humanos, el 24 de marzo se plantaron 30.000 árboles en todo el territorio nacional. Una fecha tan importante, tan significativa y que, con los hechos de las últimas semanas, donde hemos visto bolsas simulando cadáveres de referentes de los derechos humanos, no es un hecho para dejarlo pasar. Hay debates que la sociedad ya se dio, ya saldó y no hay vuelta atrás. El repudio debe ser unánime. Sin embargo, no hubo movilización. Pequeños actos, cada uno por su lado; en los barrios, en las provincias, pero con otro formato. Banderas, carteles, tapaboca, distancia.

Ese “otro formato” es lo que se repitió; la “nueva normalidad”, mientras esperamos las vacunas para poder volvernos a abrazar, para volvernos a encontrar como lo hacíamos antes. Aunque haya habido concentración de miles de adultos y adultas mayores en el Luna Park y la cancha de San Lorenzo para recibir la vacuna y había que haberlo evitado -teléfono a quien corresponda-, extrañamos ir a la cancha, un recital multitudinario. Debemos tener paciencia, ya falta menos. No obstante, debemos estar más atentos y atentas que nunca, porque si no, ese otro formato, tardará mucho más en volver a modificarse.